miércoles, octubre 04, 2006

Diccionario y Sexo

Adulterio. En la Guía de la Sexualidad editada por Espasa (en cuya portada se lee: “Toda la información para enriquecer tu vida sexual”) viene definido textualmente como “coito de una persona con otra distinta de su cónyuge”. Curiosamente, por tanto y según este experto punto de vista, quedan eliminadas ciertas otras prácticas sexuales en la conformación del adulterio. Y así, por ejemplo, toda felación (véase) efectuada con una persona distinta del cónyuge podría entenderse como... un signo de solidaridad... o de amabilidad... o de pusilanimidad... o de generosidad... o de despiste...

Felación. Variante sexual que, para muchos, se trata efectivamente de una variante, pero no necesariamente sexual. O no lo suficientemente sexual como para ser causa de adulterio.
El hecho de que éste se corresponda con el sentir de una mayoría creciente no es más que un síntoma: el de un infantilismo aterrador. Como demuestra Pascal Bruckner en La Tentación de la Inocencia, la característica más sobresaliente de la sociedad que estamos conformando es su progresiva e imparable infantilización. Véanse Norma, y Sexo oral

Norma (normalidad). En lo relativo a la sexualidad el término puede asociarse de igual forma a dos términos que se superponen y complementan: costumbre y mayoría. Si lo asociamos al primero obtendremos que norma es aquello que es habitual y por tanto no sospechoso. En principio. Pero lo que puede ser un hábito que haga felices a dos personas puede ser considerado una perversión si son muchos los que así lo estipulan. La barrera, en cualquier caso, está menos borrosa de cuanto muchos quisieran y como era de suponer se trata de una simple cuestión de grado y límites. El grado, a su vez, se establece mediante un mecanismo tan sencillo como el sentido común, eso que creen tener todos los seres humanos. Así, nos podemos encontrar fácilmente con personas que tienen muy claro que el coito anal es una práctica antinatural (y pecaminosa) y que al mismo tiempo son fanáticas seguidoras de Dónde estás corazón. O con gente que “ve” como repugnante y propio de degenerados el pissing (véase) y sin embargo “ve” sin problemas Impacto TV.

Sexo oral. Sexo que engloba un número indefinido de prácticas que, paradójicamente, no son sexuales para muchos, a pesar de ser sexo (véase Hay que joderse), como su propio nombre indica. Todas esas prácticas (o técnicas) coinciden en utilizar la boca o la lengua para dar placer al contrario ya se trate de un individuo/a o de un colectivo (véase Sexo oval).

Sexo oval. Sexo que demuestra que el “efecto mariposa” existe.
Sexo que trasciende antes o después.
Sexo jodido.

Pissing. Técnica sexual que consiste en incluir la micción en la actividad sexual. Ha de suponerse que la practica quien gusta de ella en alguna de sus múltiples variantes. Suele ser asociada al sadomasoquismo de forma exclusiva, lo cual no es más que un error que denota una cierta ignorancia al respecto de estos temas, ya que si bien es cierto que se trata de una técnica frecuente en dichas prácticas, no es menos cierto que puede practicarse con otras intenciones y por otras causas. A diferencia de la lluvia dorada, el pissing no es necesariamente interactivo y el placer que produce puede provenir de la simple observación. Algunos de los grabados de Rembrandt, dan cuenta perfecta de lo que puede ser el pissing entendido como lo que al fin y al cabo es. Algo más relacionado con los ojos que con la piel.

Hay que joderse. Frase con la que se hace referencia a algo que además de inevitable parece insoportable. De ahí que se generalice en forma reflexiva. Frase que da sentido a la frecuencia masturbatoria de cada uno.

Desviación. Concepto directamente relacionado con la idea que podamos tener de anomalía o anormalidad; o sea: con la idea que podamos tener de normalidad. A diferencia del similar término depravación, que da por hecha la negatividad de lo que engloba (con independencia del consenso que tal o cual afirmación pudiera suscitar), la desviación se emparenta con la norma haciendo referencia a una forma de salirse de ella. Las estadísticas (véase) son tan poco fiables como engañosas. Y sin embargo es por ellas por lo que sabemos todo lo que creemos saber. (véase Apariencias).

Apariencias. Por definición poco fiables. Son respecto al sexo lo que las estadísticas respecto a la verdad.

Estadísticas (sexuales). Aquellas por las que creeremos conocer la sexualidad de los demás. O mejor todavía: aquellas por las que creemos saber algo de la sexualidad. Aún hay sexólogos que se las toman en serio y trabajan a partir de los datos obtenidos en ellas. El resultado de sus estudios, por tanto, se aproxima más a la ficción masturbatoria que a una ciencia sexológica.

Normopatía. Modo con el que los psicólogos definen un estado angustioso provocado por la asunción inconsciente de ciertas prescripciones morales que provocan una “normalidad” forzada. (Véase Celibato y Moral... y por qué no, Continencia).


Moral. En 1.973 la actriz porno Linda Lovelace, famosa entonces por haber rodado Garganta profunda, dijo en una entrevista: “He sido atacada por críticos que me han calificado de monstruo inmoral. He de reconocer que me gusta mucho que me llamen de ese modo. No me avergüenzo de haber protagonizado Deep Throat. Al contrario, me siento muy orgullosa. Recientemente, Frank Sinatra me comentó que se había comprado una cinta de la película y que solía proyectarla con frecuencia en su avión privado cuando estaba de gira. También me dijo que cuando acabase con mi novio, fuese a verle”. Ocho años después, ya militante de la ultraconservadora Morality in the Media la simpática Linda decía: “Me pareció muy decepcionante que todas esas estrellas viniesen a decirme lo maravillosa que me encontraban en la pantalla. Me pregunto si no se habrían vuelto locos los artistas que yo admiraba cuando era una niña. Aún hoy, no consigo entender por qué la gente sigue interesada por aquella película”.
Lógicamente: moral es, según la Academia, “Aquello que no puede ser apreciado por los sentidos, sino por la conciencia” (véase Moraleja y Doble moral)

(Doble moral). La enérgica defensora de las foquitas (y ex sexsimbol erótico) Brigitte Bardot es una de las más entusiastas votantes de Le Pen.

Moraleja. La moral no es más que una decisión que se toma en cada décima de segundo (si tomamos a éste como unidad de medida). Y puede variar en función de las veces que cada uno estime oportuno y con independencia de que seamos incapaces de racionalizar constantemente esas decisiones. Posiblemente Linda Lovelace fuera más inmoral en su época moralista que cuando engullía penes con el consentimiento de un novio al que quería y respetaba. Es una conjetura, pero no por ello deja de tener un cierto sentido.

Celibato. Estado en el que viven algunos miembros del clero y que puede entenderse de muchas y de muy diversas maneras. Algo que muchos miembros de ese clero y alguna que otra feligresa agradecen.

Continencia. En la educación cristiana, cuando se hacía referencia a la continencia en términos generales, ésta era considerada como signo de virtud: sobriedad y templanza. En esa misma educación cristiana, cuando hablando de continencia se hacía referencia a cuestiones sexuales, se estaba hablando de recatamiento y abstinencia. Como es sabido, la moral religiosa emparentaba de “forma natural” la sexualidad con la castidad. Ahora, cuando se habla de continencia se está haciendo referencia simplemente a la capacidad de contención. Esto es, a la capacidad que tiene cada individuo de saber dosificar sus relaciones sexuales pudiéndolas controlar, tanto en lo que respecta a su frecuencia como en lo que respecta a la duración del propio acto sexual. Por regla general, están mal vistos los hombres que carecen de continencia, es decir, los incontinentes. Tanto los que lo son atendiendo a la frecuencia de sus relaciones (promiscuos) como los que lo son atendiendo al poco control que ejercen sobre su cuerpo (orgasmadores precoces). Cuando el término es aplicado a la mujer sólo sucede lo mismo cuando se hace referencia al primero de los casos; es decir: sólo están mal vistas las incontinentes que lo son por tener poco control con su generosidad sexual (véase Orgasmo).

Orgasmo. Pequeña muerte cómoda y amablemente aceptada. Puede darse en soledad o en compañía; en cualquier caso será muerte.

Muerte. Coito con el cosmos.

3 comentarios:

Roma dijo...

La definición de Orgasmo es estupenda, me encantaría verla así escrita en el Diccionario, "pequeña muerte cómoda y amablemente aceptada", es que es genial!

juan diez del corral dijo...

Hace unos días me dijeron que padecía de incontinencia por regalar tantos escritos a los amigos. Como el que me lo dijo es un capullo, ya no me cabe duda alguna de que la incontinencia, sea sexual o racional, es en estos tiempos una gran virtud.
Lo que siento es que muchas mujeres no lo entiendan y desdeñen a los que les cuentan cosas o a los que se corren pronto en homenaje a su belleza.

Cerillo dijo...

He leído atenta y concienzudo su diccionario manual del sexo. He quedado gratamente complacido, con la complacencia aquella de decir: pero esto yo ya lo sabía, me lo ha quitado de la boca. Tiene su trabajo, su volumen, su sentido común y su tamaño. Tamaño largo y gratificante. En el sexo se puede hacer de todo, como muy bien dice, sólo o acompañado, y a nadie le importa pasado los que libre y voluntariamente asumen sus riesgos (que tampoco son pocos) y sus gratificaciones (que son muchas y sabrosas), con estas pequeñas y perfectas muertes al acecho de la de todos.
Si se fija casi todo el texto habla de los que no están dispuestos a que en la vida exista nada que quede fuera de su estricto control y criterio.
Mis felicitaciones